dijous, 12 de maig del 2011

SANDRA VALERIO

COMENTARIO DEL POEMA:

INTENTO FORMULAR MI EXPERIENCIA DE LA GUERRA
Gil de Biedma


Fueron, posiblemente,
los años más felices de mi vida,
y no es extraño, puesto que a fin de cuentas
no tenía los diez años.

Las víctimas más tristes de la guerra
los niños son, se dice.
Pero también es cierto que es una bestia el niño:
si le perdona la brutalidad
de los mayores, él sabe aprovecharla,
y vive más que nadie
en ese mundo demasiado simple,
tan parecido al suyo.

Para empezar, la guerra
fue conocer los páramos con viento,
los sembrados de gleba pegajosa
y las tardes de azul, celestes y algo pálidas,
con los montes de nieve sonrosada a lo lejos.
Mi amor por los inviernos mesetarios
es una consecuencia
de que hubiera en España casi un millón de muertos.

A salvo de los pinares
-pinares de la Mesa, del Rosal, del Jinete!-,
el miedo y el desorden de los primeros días
eran algo borroso, con esa irrealidad
de los momentos demasiado intensos.
Y Segovia parecía remota
como una gran ciudad, era ya casi el frente
-o por lo menos un lugar heroico,
un sitio con tenientes de brazo en cabestrillo
que nos emocionaba visitar: la guerra
quedaba allí al alcance de los niños
tal y como la quieren.
A la vuelta, de paso por el puente Uñés,
buscábamos la arena removida
donde estaban, sabíamos, los cinco fusilados.
Luego la lluvia los desenterró,
los llevó río abajo.

Y me acuerdo también de una excursión a Coca,
que era el pueblo de al lado,
una de esas mañanas que la luz
es aún, en el aire, relámpago de escarcha,
pero que anuncian ya la primavera.
Mi recuerdo, muy vago, es sólo una imagen,
una nítida imagen de la felicidad
retratada en un cielo
hacia el que se apresura la torre de la iglesia,
entre un nimbo de pájaros.
Y los mismos discursos, los gritos, las canciones
eran como promesas de otro tiempo mejor,
nos ofrecían
un billete de vuelta al siglo diez y seis.
Qué niño no lo acepta?

Cuando por fin volvimos
a Barcelona, me quedó unos meses
la nostalgia de aquello, pero me acostumbré.
Quien me conoce ahora
dirá que mi experiencia
nada tiene que ver con mis ideas,
y es verdad. Mis ideas de la guerra cambiaron
después, mucho después
de que hubiera empezado la postguerra

Biografía: Gil de Biedma
Es un poeta destacado de la Escuela de Barcelona que nació en 1929 en una familia de alta burguesía castellana, estudió derecho en Barcelona y en Salamanca.
Su poesía evoluciona desde los primeros poemas intimistas al compromiso social.
En su poesía evita el surrealismo y recurre al coloquialismo y a la ironía para destacar los asuntos sociales y existenciales.
Una vida marcada por su homosexualidad que le lleva al pesimismo i experiencias intimas autodestructivas y a causa de una crisis deja la vida literaria.

Comentario
Como bien dice el titulo el tema del poema es la experiencia del autor, Biedma, sobre la guerra. Explica su propia vivencia de la guerra en su madurez
y podemos decir que juega mucho con dos mitades de sí mismo, ya que te cuenta la historia de su vivencia como niño, pero al mismo tiempo da su opinión.
Nos cuenta que la gente piensa que los niños son las victimas mas tristes, pero en realidad se equivocan porque su experiencia le dice que eran felices porque jugaban a guerreros y se podían sentir personas adultas. A pesar que una guerra siempre es traumática, esto nos da una sensación distinta.
Después de la guerra i al dejar de ser un niño esas ideas cambian al darse cuenta que eso no era felicidad tan solo una bella imagen de la guerra, donde los niños están indefensos en medio de una batalla que no va con ellos, aunque crean ser capaces de controlar todo.
Este poema refleja lo que siente el mismo i que lo mejor es aceptarse y asumir lo que tiene, y los sueños no realizados, es decir la perdida de juventud.

SANDRA VALERIO

Helena Bellver

Ángel González
Nació en Oviedo en 1925 en una familia de clase media. A sus solo 18 meses su padre murió i en plena Guerra Civil (1936) su hermano, Manuel, lo asesinaron por culpa del franquismo.
Cuando tan solo tenía 18 años enfermó de tuberculosis, durante su enfermedad se aficiona a leer poesía y es ahí donde el empieza a escribir sus poesías. En ese mismo momento estudia abogacía mas tarde periodismo.
Continua con su carrera de escritor publicando diferentes libros y finalmente acaba dando clases en diferentes Universidades de manera internacional.


PARA QUE YO ME LLAME ÁNGEL GONZÁLEZ

Para que yo me llame Ángel González,
para que mi ser pese sobre el suelo,
fue necesario un ancho espacio
y un largo tiempo:
hombres de todo el mar y toda tierra,
fértiles vientres de mujer, y cuerpos
y más cuerpos, fundiéndose incesantes
en otro cuerpo nuevo.
Solsticios y equinoccios alumbraron
con su cambiante luz, su vario cielo,
el viaje milenario de mi carne
trepando por los siglos y los huesos.
De su pasaje lento y doloroso
de su huida hasta el fin, sobreviviendo
naufragios, aferrándose
al último suspiro de los muertos,
yo no soy más que el resultado, el fruto,
lo que queda, podrido, entre los restos;
esto que veis aquí,
tan sólo esto:
un escombro tenaz, que se resiste
a su ruina, que lucha contra el viento,
que avanza por caminos que no llevan
a ningún sitio. El éxito
de todos los fracasos. La enloquecida
fuerza del desaliento...


Comentario del poema: PARA QUE YO ME LLAME ÁNGEL GONZÁLEZ
Este poema es un resumen de su vida, hecho hermoso y poético. Cuenta que para llegar donde esta le ha costado mucho. Para ello ha tenido que naufragar. Al decir naufragar se referirá a sus viajes para trabajar en diferentes Universidades fura de España y a conocido mundo. También cuenta que ha tenido que sobrevivir para llegar a donde está, refiriéndose a que el está vivo no como su padre y hermano que murieron cuando él era pequeño aun.
Especifica su vida como un paraje largo y doloroso, ha pasado muchas penas pero ha llegado a eso que todos desean ‘el éxito’ o puede que él no lo deseara tanto, ya que, lo describe como un camino que no llega a ningún sitio después de fracasar una y otra vez.